¡Oh Divino Redentor mío!, Jesús
- revprobertosanchez
- 11 mar 2024
- 2 Min. de lectura
Las tres horas de Agonía en el Huerto de GetsemaníOración de preparación |
¡Oh Divino Redentor mío!, Jesús, te suplico que junto con tus tres amados apóstoles me lleves también a mí para asistir a tu agonía en el Huerto de los Olivos. Prevenido por el dulce reproche que le hiciste a Pedro y a los otros dos apóstoles que se encontraban durmiendo, yo quiero velar por lo menos una hora contigo en este huerto de Getsemaní, quiero sentir por lo menos una herida de tu Corazón agonizante, uno de los alientos de tu respiro afanoso. ¡Quiero fijar mi mirada sobre tu divino rostro y contemplar cómo empalidece, cómo se turba, cómo se angustia, cómo se encorva hasta la tierra!
Ya veo, oh penante Jesús mío, cómo tu divina persona vacila y cae, cómo tus manos entumecidas se unen. ¡Comienzo a oír tus gemidos, tus gritos de amor y de incomprensible dolor que elevas al cielo! ¡Oh Jesús mío, agonizante en este lúgubre huerto de Getsemaní, haz correr en mí, en esta hora en que te acompañaré, un río, unas gotas de tu adorabilísima sangre que ya de todos tus adorables miembros estás sudando como a torrentes! ¡Oh baño preciosísimo de mi Sumo Bien que por mí agoniza, ah, haz que yo te beba hasta la última gota, que contigo beba al menos un sorbo del amargo cáliz de mi amadísimo Jesús, y que sienta dentro de mí las penas de su Divino Corazón; es más, haz que sienta que se me rompe el corazón por el arrepentimiento de haber ofendido a mi Señor, que por mí se encuentra reducido a una agonía mortal!
¡Ah, Jesús mío, dame la gracia, ayúdame para poder penar, suspirar y llorar junto contigo, por lo menos una sola hora en el Huerto de los Olivos!¡Oh Madre Dolorosa, haz que yo sienta la compasión de tu Corazón traspasado por la agonía de Jesús en este huerto!
Así sea.





Comentarios